No sé si voy a hacer una reseña, una crítica, un análisis o una recomendación, así que simplemente voy a escribir y a ver que sale.
Lo mejor con Punisher es empezar por el principio, pero no por cómo Frank Castle pasó a llamarse Punisher, sino por la primera gran etapa de este personaje.
Se trata de Punisher Marvel Knights Vol. 1, que se compone de 12 números recopilados en un solo tomo titulado Bienvenido Frank.
Este tomo es la continuación de una serie titulada Punisher purgatorio, no la he leído aún pero tengo entendido que fue un intento de reavivar el personaje después de que las ventas sufrieran una caída considerable.
En Punisher purgatorio Frank Castle se convierte en una especie de ángel vengador al servicio del cielo, fue una idea de escaso éxito difícil de encajar en la continuidad oficial de Punisher, sin embargo Garth Ennis le hizo una mención al final de número 1 del Vol. 1 de Marvel Knights.
Una vez vi un trocito del cielo.
Los ángeles me lo mostraron.
La idea era que matara para ellos.
Que limpiase sus errores en la tierra, y al final me redimiera.
Lo intenté. No me gustó
Les dije dónde podían metérselo.
Así que me llevaron al cielo para viera lo que me perdería. Una esposa. Un hijo. Una hija. Todos en Paz al fin.
No los había visto desde que se desangraron en mis brazos.
Luego me expulsaron.
De nuevo a un mundo de asesinos. Violadores. Locos. Pervertidos. Una maldad nueva a cada cinco minutos. Escupida más deprisa de lo que los hombres pueden inventársela. Un mundo en el que arrojar a un delincuente enano desde un rascacielos para decirles a sus colegas escoria que has vuelto es un acto de cordura.
Los ángeles creían que sería un infierno para mí.
Pero se equivocaban.
Bienvenido a casa Frank. Dice Nueva York.
Este es el texto, tal cual, de las últimas cuatro páginas del primer número del vol. 1. Cuatro páginas en las que vemos como Frank Castle agarra a Carlo Gnucci, y lo tira desde lo alto del Empire State.
Es un momento que me pone los pelos de punta.
En este acto desencadena uno de los mejores arcos argumentales de Punisher, en el que hace aparición una de sus mayores enemigas: Ma Gnucci.
Aquí conocemos también al detective Martin Soap y a la teniendo Molly Von Richthofen, mayor perdedor y mayor vergüenza del cuerpo respectivamente en palabras de la propia Richthofen. A ambos se le asigna la tarea de capturar a Punisher a sabiendas de que no lo lograrán.
Otros personajes con cierto protagonismo son Joan, Spacker Dave y Bumpo, los vecinos de Punisher.
La relación de Punisher con ellos es bastante interesante.
Joan es una persona que vive con miedo, miedo de cruzar la calle, miedo de la gente, miedo incluso de abandonar la cuidad e irse al campo como le gustaría. Y sin embargo cuando conoce la verdadera identidad de su vecino se siento segura por primera vez en su vida.
Es un momento muy emotivo entre tanta violencia y muerte, una persona que ve a Punisher como alguien que le da seguridad y no como un asesino a sangre fría.
Spacker Dave tiene su momento cuando los hombres de Ma Gnucci lo torturan para que revele donde se esconde Punisher y él se niega a delatarlo a pesar de no deberle nada. Es algo parecido a lo de Joan, vemos a gente inadaptada. Sin familia. Que solo tiene a sus vecinos y a pesar de que apenas tienen relación ellos saben que no tienen a nadie más.
Hay también una trama secundaria que se podría interpretar como una invitación a reflexionar sobre la idea de tomarnos la justicia por nuestra mano. Se nos presenta a tres psicópatas que matan en nombre de lo que ellos mismos interpretan como justicia.
Élite, un hombre procedente de la clase alta con ideologías de extrema derecha que mata a traficantes, mendigos, vendedores callejeros, perros y en general cualquier cosa que estropee su barrio. Éste es un buen barrio suele decir. Élite mata a todo el que afee su idílica zona residencial, incluso llega a tirar una granada a un puesto de perritos calientes porque no quiere que ese tipo de gente le baje la cotización.
Mr. Venganza. Un hombre procedente de clase baja, un ejemplo perfecto de la extrema izquierda que arremete contra los directores y ejecutivos de bancos y multinacionales. Mata sin preocuparse de las víctimas inocentes, según él en la guerra hay daños colaterales aceptables.
El Santo. Un cura que absuelve a los pecadores a golpe de hacha creyendo que está cumpliendo una misión divina.
En un principio pueden parecer iguales que Punisher, por métodos y por objetivos similares. Pero en realidad no. Esto es un punto muy bueno porque sirve para marcar una distancia entre Castle y un asesino en serie cualquiera.
Para empezar Punisher no hacen distinción entre clases, no tiene razones para ser más indulgente con nadie. Con Punisher solo importa una cosa. Si eres culpable estás muerto.
Pero es más que eso. Castle no deja que su guerra se le vaya de las manos, en ningún momento deja que lo domine. Su lucha siempre está planificada con una perfección que solo da la fría disciplina militar, evitando a toda costa los daños colaterales. Y él sabe por qué lo hace, no es por ningún tipo de ideología.
Punisher lo hace porque quiere. Lo hace porque le gusta la guerra. Lo hace porque alguien debe castigar a los criminales.
Y es plenamente consciente de ello.
Entre todo esto tenemos un capítulo, el número 3, dedicado a un enfrentamiento entre Punisher y Daredevil, no hay que olvidar que este Punisher comparte universo con el resto de personajes de Marvel. Es otro momento que te hace reflexionar sobre la moralidad de los actos de Punisher.
Solo diré que la lucha entre ellos termina con Daredevil atado, sosteniendo un revolver con una sola bala y con Punisher explicándole que va a matar a Dino Gnucci, y que la única forma de evitarlo es que Daredevil le dispare, convirtiéndose con ello en un asesino.
Es una escena muy fuerte, porque vemos a Matt Murdock, el abogado que defiende la ley por encima de todo, en un dilema moral irresoluble con el que Punisher le muestra que no todo es tan sencillo.
-Una bala. Un disparo. Una oportunidad para impedirme matar a Dino Gnucci. Es hora de que hagas esa elección de la que me hablas. No podrás soltarte a tiempo. Y no tienes espacio para tirarme el arma y quizás desviar mi puntería. Te doy la espalda. Llevo kevlar. Tendrá que ser un disparo a la cabeza.
-Espera un momento…
-Si no me disparas tendrás una muerte en tu conciencia. Una muerte que podrías haber evitado. Si disparas eres un asesino.
-¿Qué clase de elección es esa…?
-La que yo tomo cada vez que aprieto el gatillo. La que estoy tomando ahora.
Los pelos de punta.
Luego está el final boss, el premio gordo, el objetivo final de todo esto: Ma Gnucci.
No es que Ma Gnucci sea algo especial. Intenta matar a Castle varias veces sin conseguirlo y en uno de esos intentos pierde los brazos y las piernas, lo que la deja con una apariencia grotesca.
Pero Ma Gnucci no es el objetivo por ser especialmente cruel o porque su camino se cruce con el de Punisher.
No, simplemente los Gnucci son un buen punto de partida. Así de simple.
Pero eso no quita que Ma Gnucci pase de ser un buen punto de partida a convertirse en una de las enemigas de Punisher más importantes.
Durante la historia Ma Gnucci deja claro que va es un personaje difícil de matar, como se demuestra después de enfrentarse a Punisher en el Zoológico y tener un desagradable incidente con un oso polar.
Lo bueno viene después de que Punisher se enfrente al Ruso, una pelea que se adaptó con razonable fidelidad en la película El Castigador del 2004, después de vencerlo Punisher se dirige hacia la mansión de Ma Gnucci con una prueba irrefutable de la muerte del ruso gritándole ¡¿Esto es todo lo que tienes?!
Es un momento clave de la historia, en ese momento dejamos de ver a Punisher como un hombre, en ese momento vemos hasta qué punto es imparable. Vemos que no se va a detener ante nada ni nadie. Ha elegido su objetivo y no parará hasta cumplirlo. No sólo lo vemos nosotros, también lo ven los hombre de Ma Gnucci, que deciden tirar sus armas y marcharse. “No paga lo suficiente como para luchar contra eso” dice uno de ellos antes de salir por la puerta.
No hace falta que diga lo que ocurre a continuación, cuando Punisher se encuentra frente a frente con Ma Gnucci.
No hace falta que diga lo que ocurre a continuación, cuando Punisher se encuentra frente a frente con Ma Gnucci.
Así termina esta historia, 12 números que dan para mucho y que tienen su continuación en el tomo La resurrección de Ma Gnucci.
En este tomo Punisher descubre que Ma Gnucci ha vuelto de la tumba para vengarse, y no ha venido sola, el hijo de Élite también hace acto de presencia, dispuesto a vengar a su padre.
Este es un número que se complemente bien con la primera historia, pero que tampoco aporta tanto al personaje de Punisher como el tomo recopilatorio de Marvel Knights.
No hay comentarios:
Publicar un comentario